Debemos asumir desde ahora un papel protagónico, deliberante y acucioso, así como, recordar a nuestras autoridades que estan allí para servir, para atender las necesidades vitales de nuestra gente y no para despilfarrar los caudales públicos en hazañas maquiavélicas.
Ciertamente, esta falta de respeto a la ley y a nuestra dignidad nos obliga a salir de nuestra pasividad e indiferencia. Es urgente posesionarnos de nuestra Patria. Hemos dejado demasiado tiempo a los políticos hacer lo que se les viene en gana y como cita una frase, la política es demasiado importante como para dejarla exclusivamente en manos de políticos.
Debemos hacer lo que se hace en las grandes y maduras democracias. Escribir a nuestros representantes en el Congreso, participar en los medios, formar grupos cívicos y ciudadanos, manifestarse, en fin, utilizar todos los recursos legítimos y pacíficos para alzar nuestra voz. Recordar que la verdad hace temblar a los que se esconden y manipulan con fines egoístas y perversos. No olvidemos que, aunque a veces nos parezca que es muy poco lo que se puede hacer frente a una maquinaria de poder, en realidad, solo aparentan ser más de lo que son.
Pasemos a la acción y dejemos atrás los lamentos. Defendamos como hombres y mujeres valientes la patria
Debemos asumir desde ahora un papel protagónico, deliberante y acucioso, así como, recordar a nuestras autoridades que estan allí para servir, para atender las necesidades vitales de nuestra gente y no para despilfarrar los caudales públicos en hazañas maquiavélicas.
ResponderEliminarCiertamente, esta falta de respeto a la ley y a nuestra dignidad nos obliga a salir de nuestra pasividad e indiferencia. Es urgente posesionarnos de nuestra Patria. Hemos dejado demasiado tiempo a los políticos hacer lo que se les viene en gana y como cita una frase, la política es demasiado importante como para dejarla exclusivamente en manos de políticos.
Debemos hacer lo que se hace en las grandes y maduras democracias. Escribir a nuestros representantes en el Congreso, participar en los medios, formar grupos cívicos y ciudadanos, manifestarse, en fin, utilizar todos los recursos legítimos y pacíficos para alzar nuestra voz. Recordar que la verdad hace temblar a los que se esconden y manipulan con fines egoístas y perversos. No olvidemos que, aunque a veces nos parezca que es muy poco lo que se puede hacer frente a una maquinaria de poder, en realidad, solo aparentan ser más de lo que son.
Pasemos a la acción y dejemos atrás los lamentos. Defendamos como hombres y mujeres valientes la patria